sábado, 10 de septiembre de 2011

Calles de abril.

Cambios repentinos en tu vida, te atormentan día a día. Quieres esto, lo otro, y buscas mas y mas...Y eres envidiosa, lo quieres todo. Y con esto no me refiero a cosas materiales, le quieres también a él. Estamos hartos de decir que estamos enamorados, y los "te quiero's" están demasiado sobre valorados. Hoy le quieres mas que a nadie y al mes que viene ha aparecido otra persona mejor, y lo dejas todo para ir detrás de esa persona. Envidias lo ajeno, lo tuyo nunca es bueno. Quieres ser numero uno en todo lo que hagas, y no te das cuenta de que siempre habrá alguien mejor que tú; pero sobretodo tienes que aprender que siempre habrá alguien capaz de destrozarte, de dejarte por debajo del suelo. Te pueden arruinar hasta el día que crees más bonito. Y esto,como todo, también lo incluyo en las relaciones. Siempre habrá alguien que al veros juntos, quiera separaros y normalmente, no es solo una persona. Y llega un momento que todo se acaba, y aparecen las críticas: para unos eres lo peor que puedan haber conocido y para los demás, lo has hecho bien. Y la gente suele pasarlo mal por el que dirán, pero al fin y al cabo es tu vida y tú decides que hacer con ella; y nadie es quien como para decirte que es lo que tienes que hacer y lo que no. Las noches son largas consultando dudas en la almohada: ¿Lo habré hecho bien? Y que mas da, lo hayas hecho bien o mal no puedes volver atrás y rectificar, así que supongo, que el mejor consejo que se puede utilizar es "Vive el momento". Lo tuyo, es tuyo y si alguien mas lo tiene, es porque realmente no lo tienes, así que déjalo ir. No te afectes por ello, fijo que un día se arrepiente de todo y pide perdón.